El payador aguerrido, Simón Guasquita Méndez

FOTOTECA

Emblema de expresión popular, la payada es una costumbre tan argentina como el dulce de leche y el mate.

Amigos pulperos, a propósito del día del payador que es el próximo 23 de julio, vamos a contarles quién fue el primer payador argentino, que además de contar con la magnífica particularidad de llevarse bien con la guitarra, luchó contra las invasiones inglesas de comienzo del siglo XIX. Sí, nos referimos a Simón Méndez, apodado “Guasquita”.

Payando espero

Los textos de la época lo recuerdan como un hombre que estaba a la moda en el llamado barrio del alto -actual barrio de San Telmo y parte de Monserrat-, aquel que llevaba el barullo, el baile, o la reunión popular ahí donde no se encontrara. La vida para él no era más que una eterna fiesta, una continuo aquelarre. Hoy preso y mañana en libertad, así pasaba los doce meses del año sin demasiadas preocupaciones. Este compadrito se inmortalizó por su payada de “contrapunto”; en la cual se abre un duelo de preguntas que cada payador debe responder y así seguir retando y cuestionando al adversario musical.

A las órdenes del General

Pero nuestro querido Guasquita no sólo quedó en el recuerdo por sus payadas sino también por su espíritu de lucha. El payador participó como voluntario en la defensa durante la Reconquista. Con el triunfo de la resistencia ante las invasiones inglesas en el período 1806-1807, Guasquita manifestó un interés por la carrera militar, sin embargo no logró formar parte del Cuerpo de Patricios a cargo de Brigadier General Don Cornelio Saavedra.

El arte de improvisar del Guasquita lo encontramos hoy en las voces de payadores locales y del Mercosur como Atahualpa Yupanqui, José Larralde, Horacio Guarany, José Curbelo, Marta Suint y el popular Gustavo Guichón.

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