Hubo un tiempo en que la merienda estaba acompañada por una pandilla de bichos del monte. El líder de esa banda era un yacaré chamamecero y curioso: Margarito Tereré, que fue navegando hasta Santa Fe tantas veces como nuevos chicos iban aprendiendo sus canciones. ¡Cuánto habrá remontado el Paraná, don Margarito!
Yacaré aventurero
La docente y poetisa Zulema Alcayaga y su esposo, el músico y productor Waldo Belloso, fueron los creadores allá por los años ’70, de esta saga de canciones. Luego el proyecto se convirtió en programa de televisión, película y obra de teatro. La historia comenzaba cuando un yacaré litoraleño se disponía a viajar para conocer el país. Mientras que algunos de sus amigos lo alentaban y ayudaban, otros lo desanimaban. Así como en cualquier grupo de amigos, bah. Vestido de gaucho, margarita en el sombrero y un tereré (mate frío) en mano, Margarito se animaba a cualquier empresa. Sus aventuras no incluyeron sólo viajes. También hizo acrobacias de circo, ¡y hasta se arriesgó a enamorar! Correntino valiente el yacaré.
Amigos son los amigos
En la pandilla se destacaron: el pato Corbata Cuá; el mono Capote; la lechuza Misia Pataca; el árbol Cara de Hoja, el cartero Joaquín; la abeja doña Dulzura; el burrito Alfajor y la pata Doña Celestita. Pavada de grupo se mandó Margarito ¿No? El primer disco se llamó Cantocuentos y contó con la participación de Hernán Figueroa Reyes, una estrella del folklore argentino. Entre las presentadoras de espectáculos y discos se sucedieron las cantantes Jovita Díaz, Blanquita Silván, Mónica Nuñez Cortés y Liliana Serantes. Mientras que los algunos de los personajes fueron representados inicialmente por los bailarines folklóricos Armando Guerisoli; Graciela Copa; Bibiana Casamayor; Antonieta Micheli y César Franco, entre otros.
Chocolatada con galletitas ¡y good show!
En 1977 el yacaré y sus amigos desembarcaron en la tele ¡todavía en blanco y negro! Un año más tarde, Margarito Tereré se volvió película. Con alguna variación en sus personajes y artistas, la serie televisiva se transmitió durante casi quince años. En el medio, la pandilla hizo de las suyas en el teatro de España. Luego del fallecimiento inesperado de su alma mater, Waldo, el hijo de ambos, Waldo H. Belloso continuó el trabajo de su padre.
Una de las últimas apariciones televisivas de Margarito y su pandilla fue en 1990, nada menos que en el programa de Carlitos Balá. Toda una vida de aventuras ¡Eso sí que valía un “eeeapepé”!
