Siempre con distinta Milonga
Las luces se encienden y los concurrentes calientan motores; hasta que, por fin, la música llama a comenzar la función.
Las luces se encienden y los concurrentes calientan motores; hasta que, por fin, la música llama a comenzar la función.
Allá por 1934, un gigante con todas las letras asomaba en la geografía porteña. Sobre la avenida Corrientes, y con
Como “el morocho del Abasto“, “el francesito”, “el zorzal criollo”, “el mudo”, “el mago”, y hasta “san Carlos”, fue conocido
pulpería Quilapán – Defensa 1344, Casco Historico, San Telmo 1143, Buenos Aires. Abierto del miércoles al domingo de las 09hs hasta las 00hs.