La llegada de la televisión a las casas de las familias argentinas se produce en medio de críticas, suspenso y admiración. La anatomía de los hogares se modificará desde ese entonces por completo, así como también el vínculo que los usuarios tendrían con el entretenimiento.
El momento en que se encendió la primera pantalla
El 17 de octubre de 1951 es la fecha en que se da paso a la televisión nacional, cuando dos cámaras situadas en el Banco de la Nación Argentina registran el momento en que en la Plaza de Mayo se conmemora el Día de la Lealtad. Allí, Eva Perón anuncia su renuncia definitiva a la candidatura como Vicepresidente de la Nación en las elecciones que se avecinaban, por encontrarse con severos problemas de salud. Ese fue el primer paso de una evolución sin freno para la industria de los medios de comunicación.
En 1959 el avance se consolida definitivamente con la creación de las primeras emisoras privadas. Éstas captarían a un público que se iba haciendo cada vez más masivo, con nuevas y más variadas programaciones que las que hasta ese momento estaban concentradas en la opción pública y estatal. Los consumos eran cercanos, en el inicio, al teatral y cinematográfico; ya que la audiencia argentina, acostumbrada a observar en la oscuridad de los teatros y los cines las historias que pasaban delante de sus ojos, apagaban las luces y guardaban silencio ante las pantallas encendidas.
Equipos de reproducción televisiva: la originalidad del Predicta Philco
De todos los equipos conque se dio inicio a la televisión nacional, el Televisor Predicta Philco resultó ser uno de los más innovadores. Costaba 12.800 pesos argentinos y era fabricado en Filadelfia, sede tecnológica de la marca americana.
La Predicta se promocionaba como ágil, movible y extra delgado en comparación con sus competidores de la época. El eslogan que acompañaba su publicidad gráfica era: “El diseño de TV más asombroso del mercado”. Fue presentado en varios modelos de apoyo y se convirtió en el clásico de los ’50 que todos aspiraban tener. Mientras todos los televisores eran construcciones que se realizaban en armarios de madera o baquelitas, éste gestionó una marca registrada de tubo de imagen única con la promoción de una pantalla casi plana. Podía presentarse en una base rectangular que la pantalla usaba de apoyo o bien en una pequeña columna con el mismo fin.
Convocados alrededor de un Predicta Philco
La televisión fue en sí misma un fuerte quiebre respecto del modo en que las familias se disponían en los ambientes del hogar, ya que se necesitaba una pared como fondo del televisor, para que pudiera ser mirado y aprovechado por los que se congregaban a su alrededor. Sin embargo, frente a toda esta dinámica generada, la televisión Predicta Philco ofrecía una ventaja de diseño, ya que podía ser girada sobre su propio eje, lo que ampliaba el espectro desde el cual la imagen podía ser observada.
Con su diseño anatómico, su base movible y la tecnología despuntando hacia una oferta que pudiera generar comodidad, el Predicta Philco encabeza, con orgullo, el recorrido nacional de la transmisión de las imágenes en movimiento.
