Ni los fríos días de agosto calman el espíritu inquieto del francés Grégoire Fabre, mentor y dueño de Pulpería Quilapán, y durante todo el mes este espacio ubicado en San Telmo, Ciudad de Buenos Aires, ofrece un sinfín de propuestas: desde promociones, a juegos y rituales milenarios.
Aquí los niños son más que bienvenidos y por eso la Pulpería ideó un plan para festejar el Día del Niño a pura diversión y dulzura.Para el domingo 21 de agosto, un toro mecánico estará disponible de manera libre y gratuita para que los más chicos se diviertan en su día y también habrá deliciosos copos de nieve.
Ademas, tanto para los fieles parroquianos que ya hicieron de esta gran casona de estilo colonial su lugar de preferencia, como para los nuevos clientes que busquen algo diferente, la Pulpería ideóuna promoción imperdible: “Vení a almorzar cuatro veces, comé una gratis”, arengan. Así, de martes a viernes, los clientes serán agasajados con un Menú Obrero sin cargo que incluye bebida, platos a la olla o ensalada, y budín de pan o café.
La Pulpería posee características edilicias sencillas pero funcionales: patios con sombra, huerta orgánica, chacra urbana y jardín floreado. Se recrea un ambiente campesino agradable, relajado y altamente propicio para que los parroquianos se acerquen a (re)descubrir la historia argentina, y el encanto de sus tradiciones.
Por último, Quilapán no quiso quedarse afuera de un ritual ancestral que se extiende a lo largo de todo el país y, por eso, durante todo agosto el pulpero invitará a sus clientes con un vaso de caña con ruda, esa que “contra el mal ayuda”. Aunque algunos dicen que hay que tomar tres sorbos, otros un trago largo o siete tragos cortos, acá serán los clientes los que decidan cómo ser parte de esta costumbre que nació de los pueblos originarios de América.
¿Dónde? Defensa 1344, San Telmo, Ciudad de Buenos Aires.