Sedán Institec, fierros de la vanguardia automotriz

FOTOTECA

Prototipo del impulso de un país en cuatro ruedas.

Con la posibilidad de establecerse en una posición de vanguardia respecto de la industria automotriz, se promueve hacia fines de 1953 la fabricación en serie de automóviles Sedán Institec, al que se llamaría “Justicialista”, por haber sido encauzada su producción bajo la presidencia de Juan Domingo Perón. Se buscaba, por ese entonces, un auto bajo costo para que pudiera ser accesible para el trabajador.

La propuesta

Fue el Brigradier Juan Ignacio San Martín quien, siendo responsable de la Industria Aeronáutica y Mecánica del Estado, propone al por entonces presidente Perón la fabricación en serie de automóviles aprovechando las instalaciones de los talleres aeronáuticos. Con la importación de un auto y una rural DKW se da inicio al diseño que se basaría en un primer momento en la copia de la tecnología de las versiones importadas. El motor que de dos cilindros esos autos traían resultaba poca potencia para el Sedán que querían desarrollar y el Ingeniero Raúl Magallanes propuso un avance sobre ese proyecto. Su invención dio por resultado, en 1955, un motor de cuatro cilindros, dos cámaras de combustión y una cilindrada de 800cm3. A este resultante se lo denominó M-800. Si bien para la construcción de la carrocería se basaron en el Chevrolet 51, la intervención de los diseñadores aeronáuticos tuvo lugar con el aporte de unas curvas particulares. Se presenta en Abril de 1953 el Sport Justicialista que sería uno de los prototipos para que luego se organizaran los talleres y dominios en Córdoba para la construcción en serie.

La fabricación

La matriz de la carrocería se desarrollaba en madera y sobre ella iban moldeando las placas del chasis. Cada operario, siguiendo los parámetros fordianos de la fabricación en serie, cubría un aspecto del armado y su función no podía abandonarse. La mayor particularidad la incluyeron los modelos de Sedán Sport que se construyeron en plástico reforzado y eran los únicos autos respecto de los otros ámbitos de fabricación mundiales que estaban construidos con esta tecnología. La ventaja radicaba básicamente en que la inversión para la construcción de matrices era menor gracias al uso de este material. Lo que sí requería era una manipulación muy intensiva de mano de obra lo que traía una contrapartida porque las fabricación de cada pieza resultaba más costosa. Los “pares”, es decir, los autos con los que se competía en diseño y funcionalidad, construidos durante el mismo período eran el Clipper de Allard, que tuvo una fabricación de solo 20 ejemplares y que al ser de 3 ruedas tenía un uso muy limitado y el Corvette de General Motors.

La industria automotriz de los años 50 en números

El impulso industrial automotriz nació en Córdoba en los talleres que poco tiempo antes se habían abocado a la fabricación de los primeros equipos aeronáuticos nacionales. La construcción del Institec que se inició en el año 1952, alcanzó en su versión Sedán hasta el año 1955 un total 154 unidades de motor de 2 cilindros y 25 con motor 4 cilindros. Durante el mismo período se fabricaron 2660 unidades de la Institec Pick Up y 726 de la versión furgón. Antes de la puesta en marcha de la versión definitiva se elaboraron 6 prototipos hasta que finalmente quedó el que trascendió con un techo rígido.

El 16 de septiembre de 1955, la Revolución Libertadora da fin a la fabricación de la Justicialista, coche a la vanguardia de la producción vehicular argentina.