En el fragor de un verano porteño, con un atardecer que permite estirar la cena, las barras son una gran opción para generar el propio oasis incluso en el entramado del asfalto urbano. Aquí, una mención dónde conseguir tragos y bocadillos para vacacionar en la urbe.
Dentro del folklore local, la barra de la Pulpería Quilapán (Defensa 1344) nuevo espacio para saborear comidas y bebidas bien criollas, nacido de la mano del francés Gregoire Fabre, cautivado por el terruño argentino, que hace foco en satisfacer a sus parroquianos con una rica gama de Vermú: Malbec – Piaccere; Vermú Riesling – Piaccere; Caña Legui; 8 Hermanos; Pineral; Hesperidina; Fernet Branca; Fernet Beney artesanal; Gancia con limón; Cinzano con soda; Amargo Obrero con soda; Cynar Campari. Para acompañar, grandiosas picadas con productos especialmente traídos de cada provincia de origen.